domingo, 23 de diciembre de 2012

FELIZ CUMPLEAÑOS






Aprovecho a decirte despacio y por escrito todo aquello que llegó por falta de inspiración.
Ahora que me ruborizo cuando no dispersas tus miradas de las mías, hoy cercanas las fechas navideñas, quiero contarte la leve historia del olmo, roble, haya o símil que dibuje mi fábula, érase ahora aquél de tronco seco, sujeto por raíces firmes y hojas otoñadas, que se resiste a ser gris, adorna en colores y alegrías las madrugadas, anhelando con ternura cada día el amanecer de los soles con los que me iluminas. Busca con tiento, inmóvil, el acercarte de cada día y espera, mientras distrae al viento con te amos susurrados entre sus ramas.
Dulce niña, en tardes como ayer la mía, que vos regalaste en la víspera, solo puedo recordar tu jersey a rayas, disfrutando de un helado para dos, y un parchís en el que tú siempre ganas, en el que dos siempre ganan. Por ello en tu cumpleaños, no podré darte todos los antojos materiales, pero te dedico con ternura lo poco que puedo obsequiarte, mi corazón.

miércoles, 16 de mayo de 2012

¿Y si no escribo?



Olvidé en poco tiempo con qué escaso esfuerzo se enlazan las palabras ante mí... la innecesidad de plasmarlo por escrito, el sentir.
Y ahora, que pude ver el amplio registro de color del universo, cada uno de sus astros, el iluminar, su brillo, su cielo e infierno o el inmenso bello vacío entre ellos; contemplo al detalle,con orgullo perplejo, a todo ello, bordeado por el aura que irradia el negro de tus pupilas, epicentro de la gran fuerza centrípeta que me invade cada vez que estoy cerca de ti. Has ido comprobando que el espín que orienta el giro de mi no estar quieto se ha invertido y disminuye su ritmo, perplejo se para a ir mirando tu núcleo, el mismo de todas esas sonrisas que destapas desde que vuelves a verme y conservas mucho después de que desaparezca de tu vista.
Y si asomas por mi cabeza cada amanecer y no te pierde mi subconsciencia al dormitar... serás causa de mi cansado caminar matutino. Y la sonrisa que va marcando el ritmo. No requiero nunca ni uno solo de tus recuerdos porque siempre vas conmigo. Vos que no ves fin al reir, inagotable fuente de  sorpresas, todas siempre buenas, aquella que supo acallar la excentricidad, el sobrepasar... Y si te alojo en mis brazos y viajamos al ritmo de mis pasos, no requiero más del mundo para ser feliz.
¿Y si no escribo? evito el olvido de mi inspiración a base de derramar con delicadeza mis palabras en tu oído, para no perderlas...
¿Y si no recito? Será por callar los versos con tus besos...

martes, 20 de marzo de 2012

De la furtiva eternidad (Antonio Gracia)





A través de milenios, las estrellas pulieron
Su luz para que un día fulgurase un relámpago
Y toda la creación se colmase en un ser;
Las montañas alzaron sus duros roquedales,
El mar contó sus olas, y volaron los pájaros
Mientras todo fluía hacia el lugar sublime.

El fervor luminoso, la piedra, el vuelo, el agua,
Como primera arcilla del universo, unieron
Sus hondas armonías hasta transfigurarse
En la fragilidad hermosa de tu nombre.

Como un canto rodado que tallase su efigie
Innumerables saurios, caracolas,
Sílices y metales, materia constelada
Y esquirlas de infinito, se fundieron
Para tallar la vida, fecundaron
El seminal crisol de tu existencia.

Y aquí estás. Ante mí como una redención
De la naturaleza indescifrable.

Nacen los pueblos, viven y se mueren.
Todo esplendor será ceniza un día.
Pero tú estás aquí y hoy es mi siempre.

viernes, 16 de marzo de 2012

Caminando en Tercetos



El mundo yace en mi cama.
Tenue, leve, mínimo
Mantiene su calma.

Pocos en estos días,
Hayan o buscan la pluma
Que da vida a las palabras.

Lúgubre y sombría,
Prevalecen las brumas
De incertidumbres tardías

Penares y sopesares
Arrastran a automatías
A soñar con lejanos lugares.

Páramos de consuelo
Vislumbrar amagos de sonrisas
En rostros de lo ajeno.

Mis enérgicas pisadas
Diluídas en ciudad
Repican orquestadas

Camuflando la obviedad
Desvariada de destino,
Afinación e intensidad...

Ahora que marchais
iré al revés de lo demás,
Sonreiré y lo veréis:

El mundo yace en mi cama.
una vez más.
Cerquita de mi alma.

jueves, 15 de marzo de 2012

Por legado

Tengo un mundo entero durmiendo a mi vera. Ciertamente desconozco como llegué a este lugar, si primero vino el a mí o yo me hice a él. Procuro levantarme con cuidado, pereza y de soslayo, realzo en erguida posición mi desnudo recorrido a la ventana por la que atisba la claridad del día. No la cierro ni abro para evitar el despertar de mi letargado mundo. Quién sabe qué podrás estar soñando o que sueño en vida acometerá en vigilia. Suspiro y respiro despacio disfrutando del aire regalado en mis alveolos, casi puedo saborar el intercambio gaseoso, casi pinto con satisfacción el hecho tangible de sentirse realizado. Proeza, azar, simpleza, promesas, versos, locuras, poemas, besos, mejor abrazos, agua, mar, buceos,r carne y huesos, piel desnuda, sentimientos, cordura, acierto y desacierto constantes para realizarse más completo, inconformista y afortunado de lo que tengo, pues tal como utilizo el lienzo, realzo el trazo en lo opuesto al resto: cada dia tener menos y sentirme más lleno. Vislumbrar el arte de vivir sin algoritmos ni complejos formulismos moleculares. Pues en mi conjunto solo soy esto: yo desnudo y despierto, un mundo dormido como legado y quizá un leve recuerdo para los desafortunados poseedores de alma empática que se detengan en su carrera inerte hacia su propia muerte a leerme en letras. A todos ellos, siempre gracias.

lunes, 5 de marzo de 2012

"Yo estaba enferma de amor"


(Imagen extraída del Blog http://neorrabioso.blogspot.com)



-Yo antes estaba enferma de amor.- Comenzó diciendo, entre apenada y siempre confusa. Triste, tartamudeaba sonrisas difusas de no saber disimular y perdía el habla sin pronunciar palabra. Yo callaba y escuchaba, atento, sabía perfectamente lo que le sucedía. Ya dibujó la vida en mi cabeza la misma nube negra, pesada y espesa. Conocía esa sensación y aquello que calma ese enredo de dolor. Motivo por el cual pronunciaba con esmero ese silencio tan insólito en mis labios.

Silencio. Ella se desahogaba y yo con ojos tiernos revivía a cada palabra escanciada en mis oídos, el burbujeo continuo de la espuma resultante entre los cielos e infiernos por recuerdos batallando en mi sien, aullando con ferocidad a mi alma, exprimiendo con fuerza el lagrimal para que surjan cítricos, los zumos de mis ojos.
Con cada pestañeo logro retenerlo. Pues hoy es mayor el ánimo. Sonrío, hoy había despertado. El domingo fue nuestro... Nuestro momento, nuestro mejor recuerdo, no estaba todo perdido, no existe nada perdido.
Sostuve con esmero y constancia su agradecida mirada al despedirse.

Y tras su huida camino al enfrentamiento directo, yo repudiaba su nefasto comentario: "siempre estuve vivo de amor".

domingo, 26 de febrero de 2012

Ruleta rusa unipersonal




Frías agujas de metal,
Cónclaves del tic-tac,
Sufren el tiempo en su piel
Inertes, imparables en la pared.
Otra hora, repite el tronar
Absorbente y voraz.
Juega con el azar,
Voltear una vez más
El frío acero del revólver
Hace a uno ser cruel.
El mártir en su sien sufrirá
La ira de la ruleta rusa mortal.
¡Oh brutal temporalidad!
¡Oh duro y truncado fin!
Dará de bruces su ser
Con el rostro de la muerte
Y lo hallará en plena soledad
Ya que decidió borrar a los demás.
Será injusto, quizás.
Será triste, aun más.
Postergarlo: cuestión de suerte,
Situa el arma en su tez
Aprieta el gatillo, sin velocidad,
Espera un poco para disparar...
Silencio, vacío y hueco silencio,
fuera, duerme toda la ciudad
Observada tras su cristal.
Quieto, aprietó de una vez.
Entreabiertos los ojos para poder ver
como se pierde su hálito final.
Suena un "clic" y deja de sudar.
Deposita el homicida arma
en la mesa, despreciándola.

Mañana lo volverá a intentar...

viernes, 24 de febrero de 2012

Un café de atardecer





Descuelga y suena su voz,
palpita mi ser mi alma vibra.
Pliega en diez mi corazón,
De ella, no superé criba.


Y ahora, que concede
Con dolorosa facilidad
Las migajas del tiempo que no tiene,
No comprendo la amistad.

Ya no sé quien es
Y donde decidió marchar
La muñequita de la que me enamoré
Suplida por su mirar.

Interpreto un yo en mi papel
en cada café, siempre normal.
Tres de azúcar a verter
Y aun así, amarga ver su piel.

Ahora adormece más cada vez
con saberme, con saber,
pinta en oleos de intención
los sorbos del café

Cruza su mirada a hechizar
Y atraviesa mi ser
Con saña y crueldad
Sangrando si le da por desaparecer.

Se acaban los ínfimos instantes
No hay besos de despedida
El deseo es un cálido abrazarse
Se marcha y desvanece, bellísima.


Epigrama con muro (Mario Benedetti)




Entre tú y yo
Se levantaba un muro de Berlín
Hecho con horas desiertas
Añoranzas fugaces.



Tú no podías verme
Porque montaban guardia
Los rencores ajenos
Yo no podía verte
Porque me encandilaba
El sol de tus augurios.



Y no obstante solía preguntarme
Como serías en tu espera
Si abrirías por ejemplo los brazos
Para abrazar mi ausencia.



Pero el muro cayó
Se fue cayendo
Nada qué hacer 
Con los malentendidos 
Hubo quién los juntó como reliquias.



Y de pronto una tarde
Te vi emerger por un hueco de niebla
Y pasar a mi lado sin llamarme
Ni tocarme ni verme
Y correr al encuentro de otro rostro
Rebosante de calma cotidiana



Otro rostro que tal vez ignoraba
Que entre tú y yo existía
Había existido
Un muro de Berlín que al separarnos
Desesperadamente nos juntaba
Ese muro que ahora es sólo escombros, más escombros,
Y olvido.


miércoles, 15 de febrero de 2012

Desperdiciando




Ando sin andar, dicho sea de paso,
Desperdiciando mis pies caminando.
Vivo cada segundo, desflorando

Un corazón herido, sangrando sus latidos.
Sirvo de mirar cielos, azul, rojo o negro,
Regalándole mis ojos con cada pestañeo.
Válgase surtido de supiros ya,
Tras volver la vista adentro,
Y llenándole de desaire al viento.

Visto al tiempo hueco,
De segundos de provecho.
Vierto en agua mi vano aliento.
Desenvaino las fuerzas con que lidiar
En enfrentamiento,
Perdido de antemano,
ante un alma enamorada de recuerdos.

Cuerdo percibo el desuso del instante presente,
El que pierdo cuando cedo
Despistada y  atentamente
Mis dedos entre los versos,
Desperdiciando mis labios
Cuando solo se recitan por dentro.



martes, 14 de febrero de 2012

Hoy es San Valentín para los demás.





Podría elegante introducirme entre las masas, bucear entre el resto de mortales, hallarme ante ti, capaz de abrazar rosas rojas, besar el amanecer sin nubes, recitar tus lindos ojos, pintarlos de atardeceres, brillar reflejando tu hermosura, agarrar miles de libros que recitarte toda vida, buscar cada mañana entre las sabanas tu sol de sonrisa, perfilar con delicadas manos la caricia de tu risa.

Mas, hoy no es mi día.

Bien podría prohibir cruzar un solo paso a tu vera sin marcar un vals de cupido, dulcinear tus miradas a los incautos ojos quijotados que en ella se despistan. Perder los sentidos para saber que sensación da amar con tus latidos no escuchados, conmocionados al obviar que no conformes, besan sin boca los rocios del alba cerca mía. Adorar con alma y labios los enseres de lo versos lanzados a tu altar.

Pero hoy es San Valentín para los demás. No para mí.

Desbocado y alquitranado ser de penumbras, deseo ser turbia henna que se seca marchita a la espera de la piel en la que posar y abrazar, besar, cruzar cosquilleos, sentir lejos el suelo, volar entre ensueños, saborear el suave matiz del roce de sus cabellos, ser contorsionista de cada uno de sus movimientos, dar un sentido claro y directo al ofrecimiento eterno de verse enamorando cada semana, hora y segundo, haciendo en todo momento, un deleite con el que retarle a sufrir el pesar de ser amado cada día de mi vida.

Pero hoy no, hoy es San Valentín, el mío es el resto del año.

martes, 24 de enero de 2012

A Benedetti





Qué me has hecho 
Viejo amigo.
Fue leer tus versos 
Y recelo tu cuento.



Mas, ya lamento
No cerciorar antes
El mundo, el jardín,
El todavía o tu te quiero.



Te entiendo de pleno
Viejo amigo
Cuando hablas de besos
De rojo carmesí por velo.



Sustento tus mismos abrazos
Esos de amor
De cámaras, recámaras
O bajo el cielo.



Oh amor, oh Arturo,
Tan sabio, tan necio.
No hay valor a tu recuerdo.
Su amor-muerte: mi credo.



Viejo amigo, te venero.
Eres dios, fantasma,
Lluviamor y sueño.
Eres lo que anhelo.

viernes, 6 de enero de 2012

Te acuedas de cuando... (I)

Sin querer olvidar lo que he sido, a diferencia de lo que soy ahora, brindo al recuerdo de uno de mis textos favoritos el primer viernes de este año:

QUE EL AMOR SE ADUEÑE DE NOSOTROS UN VIERNES DE ÉSTOS





Voto por no dejarnos nunca uno detrás al otro, será mejor permanecer juntos al unísono.
Demos rienda suelta a la imaginación, que tus gestos dirijan el compás y los míos, el
ritmo de nuestros latidos. Siente fuerte el calor de mis huesos, deja que mis brazos sean
quienes anuden el mejor vestido para tu cuerpo. Logra forzar mi anatomía, ponla a
prueba, encajemos en más posiciones de las que el azar nos permita. No rindas al
cansancio, permanece firme, tersa y vibrante como hasta ahora, ahógame en tus labios,
esos que retuerces cuando consigo timbrar las palabras que sientes bien dentro, más allá
de tus pechos perfectos...
Dame alas, permíteme que planee al borde de tu vientre, que tus piernas sean mi
interminable pista de aterrizaje, dame una excusa para dejarme caer, perderme en tus
adentros, allá donde sólo con pensarlo, la pasión logra derretir los cuerpos, allá donde
dos almas se rozan para obtener un solo pensamiento.
Que el amor se adueñe de nosotros un viernes de éstos...

domingo, 1 de enero de 2012

Eras...




Eras el primer pestañeo matutino,
Y el último pensamiento nocturno.

Eras...

No pasa un día sin que me acuerde del querer... pasan los años y sin embargo parece ayer, cuando nos amábamos, de corazón, solo con la mirada o un abrazo. Nos amábamos.

Amor...

El amor me despreció sin miramientos. Fue minando la esperanza a base de indiferencia. Eco de la aceptación y conformidad. Acunó mi despreciada esperanza.

Esperanza, esperar, amar...

Ya no sé amar, pero no he olvidado lo que era, simplemente ya no amo. Ese deseo huyó más rápido que mis piernas cuando corro.

Correr aprisas...

Ya no hay amor en mis días. Rodeado de todo y todos, durmiendo solo o acompañado, en movimiento o parado, a pie o tumbado, corriendo o a nado. Perdió todo su significado.

Amén...

Amen o no amen el resto, les admiro, me trasmiten el sosiego de pensar que existe y es alcanzable. Mantengo fatua y leve la llama de la esperanza. Lejos ya de a quién se lo había brindado.

Quizá...

Quizá ni existas. Quizá vuelvas a tener rostro y no caras imaginadas.

Quizá, amor, querer, tú...

Quizá te acercarás a mis días, tomando entre las tuyas, mis manos, amor, quizá te acercarás a mis noches, arropando mis sueños. Te dibujo en las nubes de mi alma y te esfumas tal que humo de tabaco negro.

Quizá algún día serás lo que habré anhelado.

Quizá, quizá y quizá serás lo que nunca eras.