Ella. Por ser, era mil cosas y una sola a su vez.
Por sí sola, era toda grandeza, sin más.
Mas, una sonrisa suya era agua que beber.
Ella y sus ojos de cielo azul reflejando mar...
Era la poesía en carne viva.
Es el poema que jamás se recitaría
Era lectora y compositora compulsiva
Y ella ni tan siquiera lo sabía.
Era oído, voz, pluma y papel de cada verso
Cada vez que podía rogaba a la voz de:
-"Niño, anda leeme lo que hayas escrito"-
Anhelaba leer y escuchar el uni-verso.
Era agua en donde bracear
Ella será siempre mi medalla de oro.
Ha sido mi mayor orgullo y logro.
Y recordaré siempre su poema favorito:
De la joven cristiana y el moro piadoso.
Historias de amor de épocas pasadas
Historias bajo cielos más azules que el de hoy
De azul inimaginable, como su mejor blusón.
Todas las alhajas y bienes, por verme nadar
Todos lo metales ganados,
Sólo por poder sostener su mano
Antes de partir al más allá.
Por sí sola, era toda grandeza, sin más.
Mas, una sonrisa suya era agua que beber.
Ella y sus ojos de cielo azul reflejando mar...
Era la poesía en carne viva.
Es el poema que jamás se recitaría
Era lectora y compositora compulsiva
Y ella ni tan siquiera lo sabía.
Era oído, voz, pluma y papel de cada verso
Cada vez que podía rogaba a la voz de:
-"Niño, anda leeme lo que hayas escrito"-
Anhelaba leer y escuchar el uni-verso.
Era agua en donde bracear
Ella será siempre mi medalla de oro.
Ha sido mi mayor orgullo y logro.
Y recordaré siempre su poema favorito:
De la joven cristiana y el moro piadoso.
Historias de amor de épocas pasadas
Historias bajo cielos más azules que el de hoy
De azul inimaginable, como su mejor blusón.
Todas las alhajas y bienes, por verme nadar
Todos lo metales ganados,
Sólo por poder sostener su mano