viernes, 13 de diciembre de 2013

TÓXICA

No soy de publicar vídeos, pero esta canción me ronda día y noche en cada instante en el que respiro.

"Será más divertido..."


miércoles, 11 de diciembre de 2013

Un poco más

Cada día un poco más. Buscar, esperar, añorar, anhelar, soñar, desear, lotear... Mirar antes de pisar, con la intención de hallar algo más que baldosas y suciedad. Llorar para conseguir algo más. Tener más y más. Aunque no signifique dormir más, mejor o más mejor. Ambicionar como deporte y modo de lidiar. Aceptar y consentir para acobardar o lamentar sueños atrás, días de abundancia y poder... Poder más? ¿¿Poder un poco más??

Que tal si nos sentamos, reímos, olvidamos, sin pensar, sin pesares, si más ni menos que compartir lo que cabe entre mís labios, bajo mi piel, sostenido por mís pies, en acordes desafinados de risas, de sonrisas, de compartirlo todo, todo lo que importa, hoy y ahora, en este preciso instante, disfrutando cada dia y cada momento.

Somnoliento desplazo mi sonrisa de estación en estación, de vagón en vagón, inspirando este presente, este instante inarrebatable, irresistible, acompañado por la banda sonora del traqueteo de mi tiempo otorgado y bailando un tango con tu recuerdo a cada recuerdo que me aguarda en saberte queriendo vernos en el reencuentro diario. Porque asi lo quiero, lo pienso y sueño. Lo siento cada momento, cada día un poco más.

lunes, 9 de diciembre de 2013

Sin pensarlo

Sin pensarlo demasiado, levanto discreto la vista y observo. Se desvaneció la luz fuera del vagón, se deshizo la última estación debido a la velocidad. Sólo quedamos ella y yo sentados uno frente al otro evitando coincidir nuestras miradas. Nada más, el resto del vagón ajeno a nuestra batalla personal por ignorar lo inevitable.

Detengo mi escritura, paciente espero el coincidir de su inquieto no mirar, y, al pestañear, consiento que sus pupilas se humedezcan bajo los mismos párpados que las mías. Durante décimas de un segundo, lo compartimos todo. Justo antes de su descender en la siguiente estación, pinta en carmín complaciente, una ligera sonrisa de complicidad desvaneciendose en el gentío acelerado.

Sin pensarlo demasiado, he retomado la escritura perdida de meses sobre dos ruedas.